Siendo el escort favorito de la Mafia, Bastian recibió instrucciones claras para reunirse con el guardaespaldas Rico en un lugar seguro del barrio alto. Desde allí, sería conducido hasta el ático donde la valiosísima mercancía sería entregada sin problemas al jefe mafioso que había requerido sus servicios sexuales.
Cuando Bastian llegó al lugar de encuentro, Rico le dijo que harían una parada en otro lugar antes de dirigirse a su destino final y acabaron en un edificio de apartamentos. Bastian estaba confundido por la inusual parada, pero Rico le explicó que los dos iban a pasar un ratito juntos y a solas antes de conducirle hasta el ático del jefe. Bastian accedió sonriente, hace tiempo que aprendió que ser la fuente de placer y del entretenimiento carnal para la Mafia y sus turbios empleados significa ser una tentación para todos ellos: jefes, cuidadores y guardaespaldas, que no pueden resistirse a catar la deseable mercancía.
Mirándole fijamente, Rico empieza a tocar el cada vez más grande paquete de su entrepierna y se le hace la boca agua, al mismo tiempo que Bastian se sienta en el sofá esperando que el musculoso y peludo guardaespaldas se acerque. Sin perder un minuto, el grueso y enorme rabo sin circuncidar de Rico está fuera de sus pantalones y Bastian estira la mano para coger el impresionante miembro dispuesto a demostrar su experiencia con tocamientos eróticos y la masturbación de esa polla.
Entre gemidos de placer seguidos de una respiración profunda y entrecortada, Rico deja que Bastian juegue con su palpitante polla durante unos minutos muy calientes, pero el musculoso y rudo guardaespaldas mafioso ya tiene decidido metérsela en la boca al sumiso chapero para que haga su trabajo…
Aunque el enorme rabo de Rico es muy grueso y pesado, Bastian se las ingenia para metérselo por completo en la boca y engullirlo hasta el fondo de su garganta. Los labios lujuriosos del escort y su lengua se ocupan de esa verga, dejándola empapada de saliva y lista para follarle el culo, algo que ambos saben que está a punto de pasar.
Viendo al guardaespaldas tremendamente excitado, Bastian se deshace de sus pantalones para colocarse instintivamente a cuatro patas. El experimentado sirviente sexual está acostumbrado a las pollas más grandes destrozando su culo, pero en este caso tiene que tomar una buena bocanada de aire y agarrarse al respaldo del sofá.
Sin usar su propia saliva ni lubricante, el ruidoso hombre de la Mafia apunta con su polla directamente al depilado y estrecho ojete del joven para empotrarle profundamente sin miramientos. Rico gime extasiado, sorprendido por la inesperada y extraordinaria estrechez del ojete de Bastian.
Y así es, Rico usa el increíble cuerpo de Bastian para obtener el máximo placer. El fornido y maduro semental se folla el sensacional y estrecho culo en todas las posturas que le vienen a la cabeza –y son un montón.
Aunque Rico asume las consecuencias de sus actos y el grave problema que se está buscando por culpa de su compulsivo apetito sexual, el caliente guardaespaldas decidió hacerlo nada más ver a Bastian. Simplemente no podía evitarlo… ese culo, ese cuerpo, esa cara, el chico era irresistible y tenía que follárselo allí mismo.
Demasiado pronto en la opinión de Rico, Bastian se corre cabalgando sobre él, salpicando sus muslos de semen caliente a medida que Rico le embiste desde abajo con su polla, cada vez más profundamente, alcanzando su próstata con cada potente envite. El esfínter del escort cerrándose de golpe, con espasmos en el momento de su orgasmo es superior al apasionado mafioso, que también se corre con varios y potentes chorros de esperma brotando de su pollón, llenando por completo las entrañas de Bastian.
El sensual joven sonríe satisfecho por otro trabajo bien hecho… O tal vez un ensayo de los depravados servicios que deberá ofrecer esa misma noche al jefe de ambos.
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