Cuesta creer que la primera escena entre Barron y Rocky fuese hace tanto tiempo, pero todavía cuesta más de creer que se hayan convertido en los completos chulazos que vemos ahora.
Ambos están mejor que hace cinco años, más musculosos y más guapos que nunca, así que reunirlos de nuevo en una escena solo podía traer el sexo más ardiente.
Más allá de sus impresionantes cuerpos, trabajados y desarrollados durante años, Rocky también se ha convertido en un joven y fogoso semental sin prejuicios a la hora de follar con otros chicos.
Y algo que se ve claramente en esta escena de hoy es lo mucho que le gusta besar y acariciarse con otro hombre, lo mucho que disfruta de esas increíbles sensaciones, lo ansioso que se muestra por besar al otro, restregar su cuerpo con el suyo o mamar... pero sobre todo, lo mucho que le gusta que empotren su perfecto culo.
Rocky no podía esperar más, deseaba que Barron se lo follase aquí y ahora, así que, tras su larga ausencia y sin poder contar con él durante tanto tiempo, en el estudio no iban a dejar esperar a nadie ni un segundo más.
Finalmente, Barron hace suyo el ojete de Rocky y no deja de follárselo hasta que se le corre en la boca y él lo hace en sus nalgas antes de volver a penetrarle.
