Mientras Adrian está sentado en el jardÃn, Dean está muy cachondo, tumbado en su cama sin perderle de vista, asà que se baja el bañador y empieza a menear el culo, provocándole a través de las puertas correderas de la habitación.
El ojete de Dean invita a que Adrian, ya empalmado, pase al interior para meterle un dedo y devorar ese culo perfectamente depilado.
Dean se pone a cuatro patas sobre la cama para que Adrian pueda empotrar ese hambriento ojete con su enorme rabo.
Después de que Dean se tome una pausa para dejar reluciente la polla de Adrian con su boca, se monta encima para cabalgar al musculoso mirón del jardÃn, hasta que Adrian decide desmontarle para mamarle la polla y lamerle el ojete de nuevo.
Adrian no puede permanecer demasiado tiempo fuera de Dean, asà que mete rápidamente su enorme verga dentro de su rubio favorito hasta que ve como se corre salpicando su propio estómago.
Completamente sudado por el calor veraniego, Adrian sigue embistiéndole con su dura polla de ébano hasta que ya no puede aguantar más y la saca para correrse sobre las pelotas de Dean, metiéndosela de nuevo hasta el fondo antes de acercarse para besarle con pasión.