En uno de estos días soleados de verano, Josh y Sebastian recorren la ciudad en sus patinetes. Están a más de 40 grados ahí fuera, pero las cosas se van a poner aún más tórridas.
Esta deliciosa pareja apenas pueden contener su insaciable apetito, así que después de quitarse las camisetas en el parque se besan apasionadamente a la vista de todos. En ese momento los chicos deciden irse a un lugar un poco más privado y que las cosas se pongan REALMENTE calientes. Su piel bronceada brilla mientras catando el sabor salado del sudor en sus labios lujuriosos y las manos de Josh recorren el cuerpo de Sebastian hasta encontrar su paquete.
Su sedienta boca sigue el mismo camino rápidamente y devora el grueso pollón sin circuncidar de su amigo hasta dejarle satisfecho, tumbándose en la cama para que Sebastian le devuelva el favor.
Sebastian mama la polla del musculoso joven con una babeante habilidad, antes de que Josh le tire sobre la cama para comerle el culo como si fuese su almuerzo del día.
Después de penetrar el suave y estrecho ojete con su talentosa lengua, Josh apunta el pollón y acierta en la diana para hacer lo que mejor sabe hacer.
Tras follarse como un experto a Sebastian tumbado de espaldas sobre la cama, Josh le voltea y le hace morder la almohada, empotrándole el culo aún más fuerte. Josh tiene el control total, embistiendo el culo del guapo pasivo como una bestia, agarrándole por la garganta y haciéndole arquear esa espalda bronceada como una zorra en celo.
Y es que Sebastian está tan caliente que toma el mejor asiento de la casa, cabalgando sobre la verga de Josh como cowboy en un rodeo.
Incapaz de contenerse por un minuto más, Sebastian se masturba hasta que esa polla sin circuncidar escupe todo su semen cubriendo el torso bronceado del musculoso semental. Con el sudor resbalando por la frente, Josh mira a los ojos a Sebastian y le empala con su palpitante rabo hasta las pelotas. El placer del orgasmo se refleja en su bonita cara antes de retirar su grueso miembro del ojete de Sebastian, dilatado y boqueante, ofreciéndonos una última toma en la que la corrida de Josh chorrea fuera de él.
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