La cancelación de su vuelo y los hoteles completos han obligado al militar Beau y al cansado viajero Bruce a pasar la noche tumbados en los asientos de un área aislada y con poca luz de la terminal.
Aburridos y en busca de una manera mejor de pasar el tiempo, ambos chulazos se sacan las pollas para pajearse frente a frente hasta que se acercan para mamarse las pollas el uno al otro.
Con su polla sin circuncidar bien empapada de saliva, Beau está listo para follarse a pelo el culo de Bruce, pero antes le come el firme y redondeado culo al viajero desconocido corriendo el riesgo de que pueda verles cualquiera que pase por allí.
El fornido militar empotra el culo de Bruce, que le devuelve el favor deslizando su palpitante rabo por el ojete de Beau, follándole a pelo ese culo peludo y más blanco que el resto de su bronceado cuerpo tirado sobre su propio equipaje.
El musculoso viajero embiste al militar con todas sus fuerzas hasta que los dos se corren cubriendo el peludo cuerpo con su semen caliente.
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