Los nuevos reclutas Jake, Marco y Max se tumban en sus camastros del cuartel después de un largo y duro día de entrenamiento, pero eso no es lo único duro...
Mirando una foto, Jake les comenta lo mucho que echa de menos poder follarse a su novio, así que Marco lo toma como una invitación y se pone a mamarle la polla.
No queriendo quedarse fuera de la diversión, Max se une y pronto está siendo follado al mismo tiempo por la boca y por el culo por los otros dos soldados.
Poco después es el turno de Marco para follar el estrecho ojete de Max, y lo hace mamándole la polla a Jake mientras embiste el culo del pasivo tumbado de espaldas sobre el camastro.
A pesar de todo Max no tiene suficiente y cabalga montado sobre la polla de Jake, que también disfruta de un buen rabo cuando cabalga sobre Marco mientras Max se pone a mamársela.
Al final, Jake y Marco se ponen de pie para correrse encima del culo respingón de Max, que siente el semen caliente chorreando por sus nalgas.
Ahora ya pueden descansar y caer rendidos para poder afrontar el duro entrenamiento que continuará al día siguiente.
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