Despreocupado e insaciablemente cachondo, el rubio y musculoso Felix pasa el día siendo follado en cada habitación de la casa por Thomas, el guapo y apasionado semental de voz profunda y enorme rabo.
Su primera parada es en la sala de estar, donde Felix engulle hasta el fondo de su garganta la polla sin circuncidar de su follamigo y se abre de piernas para que devore su ojete sobre el sofá.
El sonido de sus firmes carnes entrechocando, los lloriqueos de placer de Felix y los gemidos profundos de Thomas resuenan entre las cuatro paredes cuando este se lo folla a pelo, embistiéndole incansablemente hasta correrse a cubos.
Pero eso solo ha sido el principio, porque todavía le quedan muchas habitaciones donde seguir follando...
Comments