Joey y su novio Shadow follan en el sofá sin importarles que Sumner pueda verles cuando llega a casa, pero cuando Shadow, inesperadamente se corre demasiado pronto sobre la cara de Joey, al niñato no le hace ninguna gracia.
Dispuesto a solucionar el problema, Joey se cuela en la habitación de Sumner en busca de una polla que le satisfaga y empieza a mamársela para que se le ponga dura como una piedra.
El musculoso chulazo rubio está encantado de darle lo que necesita, follándose a Joey a cuatro patas sobre su cama… hasta que recibe una llamada y también le deja a medias.
Al frustrado pasivo se le cae un vapeador debajo de la cama, donde al ir a cogerlo se queda con el culo en pompa… que es como lo encuentra Shadow y de nuevo empalmado le da a ese ojete lo que tanto quería.
Cuando Sumner vuelve a su cuarto y los ve follando, los dos sementales comparten al insaciable niñato hasta que por fin se corre sobre su propio estómago y ellos dos acaban corriéndose sobre su cara.
