Al joven Oliver le encanta caminar completamente desnudo por toda la casa y por el jardín, pero a su escandalizado vecino no le gusta tanto como a él.

Por eso, respondiendo a su denuncia, el agente Brandon se presenta en casa de Oliver para hacerle una severa advertencia por exhibicionismo.
Desde el momento en que cruza el umbral de la puerta Oliver hace todo lo que puede para librarse de los cargos y del problema, arrodillándose delante del policía para mamarle la polla...


El sorprendido agente decide aprovecharse de la situación y se quita el uniforme para devolverle el favor al fogoso exhibicionista, lamiendo su estrecho ojete antes de empezar a follárselo.



Pero Brandon no se conforma sólo con eso, él es versátil y viendo la polla de Oliver no quiere marcharse de allí sin sentirla dentro de su culo. Si el exhibicionista quiere mantener limpio su certificado de antecedentes penales debe complacer sus deseos... ¡Y Oliver lo hace encantado!

Comentarios