Jayden, nuestro mecánico de la estación de servicio de “la puerta de al lado” tiene un nuevo cliente: Ryder.
Ryder había oído hablar de su excelente “servicio” y ha acudido para comprobarlo, pero no para su vehículo, que está perfectamente. Desafortunadamente para Ryder, Jayden le dice que en ese momento no puede atenderle, pero el nuevo cliente insiste y le pregunta que servicio le ofrecería en caso de poder hacerlo. Jayden le dice que antes de nada debería hacerle una “inspección a fondo” y ya que de momento no tiene otros encargos puede hacérsela ahí y ahora.
Ryder se desabrocha la camisa y es evidente que a Jayden le gusta lo que ve, así que le ofrece “aire de calidad” aunque le recalca que no se lo ofrece a cualquiera. Ryder no se rinde, mostrándose confiado, así que finalmente convence a Jayden que le dice que entre por la puerta trasera y pone el cartel de “cerrado” en la principal. En cuanto Ryder entra al taller, los dos se besan y dan por seguro que van a pasarlo en grande con este “servicio”.
Ryder es el primero en arrodillarse para mamar el enorme rabo de Jayden, tragándoselo por completo hasta el fondo de su garganta sin atragantarse, pero el mecánico no tarda en devolverle el favor a su cliente.
Después de haberle comido el culo, Jayden empotra el culo de Ryder sobre una de las motos que estaba reparando, embistiéndole por detrás y haciéndole gemir de placer mientras le bombea ese “aire de calidad” que le había ofrecido.
Tirado de espaldas en el suelo con las piernas abiertas, Ryder sigue siendo follado a pelo por Jayden hasta que ya no puede más y se corre sobre su propio estómago.
Eso excita muchísimo al mecánico, que se masturba hasta correrse sobre las pelotas de Ryder. Jayden vuelve a meterla por el ojete de su cliente para bombear un poco más de su “aire de calidad”. Sin duda, esta estación de servicio es la mejor de la ciudad, como le habían asegurado a Ryder.
