Sumner y su novio han acudido a unos famosos almacenes suecos de muebles en busca de algunas cosas para su apartamento y recorren la exposición buscando lo que necesitan. Dom trabaja allí y no puede evitar fijarse en el culazo de Sumner que se marca en sus ajustados tejanos, así que le sigue discretamente hasta la sección de dormitorios.
Allí, Sumner prueba la resistencia de una de las camas como si estuviese follando encima, lo cual pone muy cachondo al empleado, así que cuando se le rompen los pantalones por la parte trasera dejando a la vista su ojete Dom entra en acción y empotra con su dura verga al sorprendido cliente. ¿Quién dijo que nunca encuentras a un empleado cuando lo necesitas?
Escondidos bajo un edredón nórdico para que no les vea el novio de Sumner, Dom sigue follándoselo por detrás, pero no tardan en quitarse toda la ropa para que el satisfecho cliente cabalgue montado sobre esa polla.
Tras mamarse las pollas el uno al otro, Sumner cabalga montado sobreDom empotra a Sumner de lado y tumbado de espaldas sobre la cama hasta que le hace llegar al orgasmo.
Dom saca su enorme polla para correrse sobre el culo del pasivo, que sale de allí con su novio convencido de que la cama que han comprado resistirá sus polvos más salvajes y dejan al empleado con un edredón cubierto de semen que ya no podrán vender.
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