A pesar de un nombre artístico tan inglés, Scott es una estrella española del porno gay y tras unos años de ausencia ha vuelto. Hoy le tenemos junto a Justin, no solo delante de las cámaras, también como pareja. En esta escena se refleja el amor, la admiración y el afecto del uno por el otro a medida que avanza la acción.
De alguna manera cada uno de ellos es el reflejo del otro, pero nos atrevemos a ir más allá a medida que se desnudan y Justin se arrodilla impaciente para rodear con sus labios la palpitante polla de Scott demostrándole lo bien que lo puede hacer y cuanto placer es capaz de darle.
Justin desenvaina el capullo de la polla de Scott y lo lleva al máximo placer con su talentosa lengua y labios.
La habilidad de Justin anima a Scott a darlo todo cuando le devuelve la mamada, engullendo toda la polla de Justin. La boca de Scott sube y baja a lo largo de ese jugoso rabo, inhalando el sensual aroma que desprende el vello púbico de Justin. Como si fuese un frasco de popper, ese aroma lleva a Scott fuera de si devorando ansiosamente esa polla.
Con Scott tumbado de espaldas en el sofá, Justin se sienta sobre su cara y nuevamente, el aroma que desprende lo pone a mil para follarle el suave ojete con su húmeda y cálida lengua.
Justin se baja para colocarse delante de Scott, agarrándole las piernas por los tobillos para acceder a su peludo ojete y empotrándole a fondo con su rígida polla. Justin se lo folla con un ritmo suave al que Scott responde con gusto.
La pareja vuelve a intercambiar sus posiciones y Scott le da la vuelta a Justin para deslizar su polla hasta el fondo de su hambriento culo.
A medida que Scott aumenta el ritmo de sus embestidas, en el espejo que hay en el suelo vemos el reflejo de su asombrosa follada.
Otro cambio de postura y la verga de Scott vuelve a abrirse paso por el estrecho y calido canal de Justin, tirándole de los pies para ponerle cabeza abajo, con los hombros apoyados en el suelo y el culo en alto, penetrándole como un martillo pilón de tal manera que Justin es incapaz de resistirse a todo el placer que le provoca Scott.
Justin ha sido penetrado a la perfección y chorros de semen caliente empiezan a salpicar su propia cara y su barba. Viéndolo, Scott se corre poco después, cubriendo el rosáceo y boqueante ojete de Justin con su esperma antes de metérselo dentro con sus dedos, besándole con ternura.
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