Aunque no seamos muy fans de este estudio especializado en porno gay con niñatos, hay uno de ellos que siempre nos llama la atención: el premiado rompeculos Josh, que en esta ocasión tiene una cita con Adam a su paso por la ciudad.
La inocencia de Adam le hace adorable, confesando que nunca ha apostado dinero y que esta es sólo la segunda vez que bebe alcohol. Pero en su cita con un guapo semental como Josh, Adam va a perder esa inocencia y aprenderá un par de cosillas. Tras una cena y unas copas por los locales de moda, seguimos a Josh y Adam hasta un lugar más privado, en el que enseguida empieza a subir la temperatura, porque la ingenuidad del niñato deja paso a la atracción más irresistible y a un apetito insaciable de polla.
Los besos y las sensuales caricias que se dedican el uno al otro dan pie a que Adam explore con sus manos el cuerpo musculoso de Josh, haciendo una parada en su enorme rabo para admirarlo mejor.
Josh desliza ese pedazo de carne palpitante en la boca del guapo niñato para follarle la garganta sin contemplaciones, pero también le besa y le devuelve el favor, dejándole tan boquiabierto como a nosotros, contemplando el talento del veterano pornostar.
Y cuando el ya no tan inocente chulillo se da la vuelta, Josh está listo para demostrarle el resto de sus habilidades para el sexo. Con la precisión de un experimentado activo, Josh clava su verga en el ojete de Adam, haciéndole sujetarse bien al sofá para empotrarle más y más profundamente con cada embestida, lentamente...
Adam gime con una dulce combinación de placer y dolor a medida que su hambriento y cálido ojete se acomoda a cada centímetro de la polla de Josh.
Josh controla a su juguete con facilidad, agarrándole de la cabeza para besarle o indicándole que se siente sobre su verga para cabalgar, follándoselo sentado. El joven niñato acelera el trote, subiendo y bajando cada vez más rápido sobre esa gruesa polla, más como un putón cachondo que como el chico ingenuo que entró por esa puerta. Su considerable polla también frota el bronceado estomago de Josh con cada uno de sus movimientos...
Incapaz de contenerse, Adam agarra firmemente su rígido pollón para ordeñar hasta la ultima gota del blanco y caliente esperma acumulado en sus pelotas, corriéndose sobre el bronceado torso de Josh y desplomándose sobre su hombro mientras Josh le sigue follando desde abajo.
Tras bombear el estrecho ojete de Adam, Josh se corre dentro de él, rellenándole con su corrida caliente y separando las nalgas del niñato para que el semen salga por el boqueante ojete de su última conquista.
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