Hace poco que Ryan acaba de mudarse a la ciudad, pero mientras encontraba el apartamento ideal y se incorporaba a su nuevo trabajo ha tenido la suerte de que Mateo, el mejor amigo de su hermano en el instituto, le ofreció quedarse en su piso.
Ryan siempre se había sentido atraído por Mateo, irlandés como él, guapo, deportista, musculoso, siempre marcando un buen paquete en sus ajustados tejanos... Tontearon más de una vez en aquellos años, así que cuando Ryan se instaló en su piso no esperaba que estuviese dispuesto a rememorar aquellos tiempos. ¡Pero para su sorpresa, sí que lo estaba!
Tras varias semanas Ryan ya tiene el apartamento que buscaba y ha llegado el día de instalarse en él, aprovechando el fin de semana de San Patricio. Cuanto antes terminen con todas esas cajas, antes podrán salir de fiesta, pero Mateo y Ryan se dan cuenta enseguida de que ha surgido un problema con el camión de la mudanza y mira por dónde, disponen de un tiempo extra para divertirse. ¿Por qué no follar por última vez antes de dar por finalizada su situación?
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