El escenario no podía ser más espectacular y bello, Harold y Ridick culminaban su estancia en Puerto Rico besándose apasionadamente en el balcón de la villa frente al mar y se metían mano por todas partes a medida que el sol se ponía en el horizonte.
Pero por maravillosas que fuesen las vistas o la puesta de sol, nada iba a detener a estos dos chulazos, que se desnudaban por completo en ese balcón para que Harold devorase el culo de Ridick.
Una vez dentro y en la cama, Harold se lanzaba también a por la polla sin circuncidar de Ridick para saborearla antes de volver a ocuparse de su estrecho ojete, lamiéndolo y penetrándolo con sus dedos.
Harold es un completo activo y Ridick estaba ansioso por disfrutar de su enorme rabo sin circuncidar, más que encantado de ser un completo pasivo para el hombre adecuado. Y nadie podrá decir nunca que Harold no sea el hombre adecuado para que Harold te folle a pelo, a Ridick o a quien sea.
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