Y seguimos con Sam, días después de aquella cena y antes de acudir a una entrevista de trabajo con Malik, cuando descubre que su novio le ha dejado una sorpresa al lado del sofá para que no le olvide mientras él está de viaje: un estimulador de próstata por control remoto.
Sam decide ponerlo a prueba ese mismo día, deslizando el diseño de silicona ultra-suave dentro de su culo antes de vestirse, pero cuando sus diez modos de vibración se activan en medio de la entrevista de trabajo, Sam se encuentra en un inesperado, aunque placentero aprieto.
Malik consigue que el niñato le cuente toda la historia y antes de que puedan darse cuenta Sam está mamando la enorme polla del irresistible entrevistador, que reemplaza con ella el estimulador de silicona para follárselo enérgicamente sobre su mesa.
Malik levanta al joven pasivo y le sujeta a pulso entre sus brazos para seguir follándoselo de pie, pero acaba poniéndole cabeza abajo para que pueda mamarle la polla mientras él le mete un dedo por el culo.
Estimulado al máximo por las persistentes vibraciones que le ha dado el regalito de su novio, Sam se corre mientras cabalga montado sobre la verga de Malik y se arrodilla para recibir toda su corrida en la cara.
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