Cuando Sean necesita que alguien le eche una mano en el gimnasio siempre puede contar con Zod para bombear... sangre en sus músculos o semen en su culo mientras levanta las pesas.
Aunque se le hace la boca agua pensando que la larga polla de Zod le llegaría al fondo de su garganta en medio de la desierta sala de pesas, Sean no interrumpe su entreno y solo se toma una pausa para recuperarse y mirar bien el paquete de Zod.
Ya desnudos, los dos chulazos hacen un 69 sobre uno de los bancos antes de que Zod se coloque en posición para que Sean devore su culo y para ser empotrado a pelo por el musculoso Sean.
Después es el turno para que Zod tome las riendas, mamando la polla de Sean y deslizando la suya a pelo dentro de su sudado ojete.
Los musculosos y versátiles chulazos sudan la gota gorda follándose el uno al otro, hasta que ya no pueden más y Zod saca su pollón para correrse sobre el culo de Sean. Follándole la garganta, Zod lleva al orgasmo a Sean y una enorme corrida brota con fuerza de su enorme rabo cubriendo sus relucientes abdominales.