La vida de un heredero al trono no es todo diversión y sin trabajo, un ejemplo claro es el del Príncipe Peter, que debe recibir a un grupo de jóvenes universitarios en una visita al Palacio Real, entre los cuales se encuentra Joey.
Cuando su apuesta y fogosa Alteza ve a Joey sentado entre el resto del grupo ya es incapaz de concentrarse a la hora de describir las obras de arte y antigüedades que decoran el viejo edificio... especialmente cuando el niñato se arrastra hasta debajo del atril para mamarle su enorme pollón.
A Joey le encanta el exquisito sabor de la Polla Real y en cuanto el grupo ha abandonado el salón, el excitado Peter le rasga los tejanos al plebeyo para hacerle una demostración de lo que significa ser follado por la Realeza.
Peter empotra al niñato a cuatro patas y le folla la boca, incluso volteándole y sosteniéndole entre sus brazos para que Joey le siga mamando el pollón cabeza abajo.
Joey cabalga sobre la verga de su Alteza hasta correrse y recibe toda la corrida Real sobre su cara.
¿Habrá encontrado por fin el díscolo príncipe a su pareja perfecta? ¡No creemos que la Reina esté de acuerdo... si es que no muere antes de un infarto!
