ADOPTANDO AL PERRITO

Ali estaba paseando por el parque cuando un hombre con canas le puso una correa en la mano y salió corriendo. Al otro lado de la correa estaba Charly, un pasivo con mascara de perro, que quería comerse el “hueso” de su nuevo amo.

Los transeúntes acarician al sumiso que se comporta como un buen perrito y con cara apenada le dice a Ali que probablemente su amo no va a volver, así que Ali se lo lleva a casa.

En su nuevo hogar, Charly suplica que Ali saque su polla de los pantalones y se la mama allí mismo, con la máscara puesta.

Después se lo folla a cuatro patas en el sofá y Charly cabalga montado sobre la dura verga de Ali hasta que se corre.

Obedientemente, Charly baja al suelo donde recibe toda la corrida caliente de su nuevo amo sobre la cara.  

Ali se ha encariñado con él y quiere quedárselo para siempre, pero Charly vuelve a ponerse su máscara y se marcha.

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