Si recuperásemos nuestra vieja encuesta del “chulazo del año” para elegir al que más os ha gustado seguro que Barron sería uno de los que tendrían más probabilidades, porque ha tenido numerosas escenas y en todas nos ha dejado con la boca abierta… tanto como el ojete de Dallen en esta.
Dallen llegó al estudio con ganas de probar nuevas cosas, experimentar un poco y abrir sus horizontes. ¡Y era cierto, porque se tira de cabeza junto a Barron cuando solo han pasado ocho meses desde que debutó!
Estaba muy claro desde el instante en que le vieron que es atrevido y accedería con entusiasmo a cualquier sugerencia que le hicieran. Así fue desde su primera escena en solitario y a lo largo de las que protagonizaría después, razón por la que ha vuelto.
Dallen está impaciente y es obvio que a este joven y guapo semental le encanta el sexo, tanto que piensa aprovecharlo al máximo y se lanza a por el rabazo de Barron apenas empieza el rodaje como si estuviese famélico y no hubiese mamado uno así desde hace años.
La destreza en la mamada de Dallen pone tan caliente a Barron que muestra la misma impaciencia por devolvérsela y lo hace a su propia manera, pero eso solo es para poner a punto a Dallen para el evento principal: la incansable y profunda follada con la que piensa destrozar su ojete.
Dallen ya se imaginaba a lo que iba a enfrentarse cuando le dijeron que Barron sería su pareja en esta escena. La reputación del semental le precede y el tamaño de su impresionante polla también, además de que sabe como usarla. Pero siempre abierto a todo y aunque estuviese un poco nervioso, Dallen no pensaba echarse atrás.
Viéndole en acción creemos que disfruta tanto como nosotros y al final acaba enganchado a la polla de Barron, deseando repetir en una próxima escena.
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