El musculoso celador Cole advierte al joven prisionero Jake, que llegó hace unos días a la cárcel, de que sea amable con Joel, su tatuadísimo compañero de celda, porque está bastante chalado.
En cuanto Jake extiende su mano para presentarse, Joel le escupe y se pone agresivo, así que Cole entra en la celda para ponerle las esposas y se lo lleva a confinamiento en solitario.
Una vez a solas con él, Joel le dice al celador que se calmará si le mama la polla, así que Cole se arrodilla para hacerlo, quitándole el mono naranja al prisionero para que le pueda follar por detrás.
El desequilibrado y fogoso prisionero se lo sigue follando tumbado de espaldas sobre la litera de la celda de confinamiento y le devuelve la mamada a Cole, que se monta sobre su polla para cabalgar hasta correrse. Joel no tarda en correrse también en su culo…
Mas tarde, cuando el celador les da la espalda y se queda adormilado en su sillón, Joel y Jake empiezan a montárselo en su celda. Bruce, que estaba fregando el suelo, ve a Jake comiéndole el rabo a su compañero de celo, se pone muy cachondo y se saca el mono naranja para pajearse, pidiéndole al niñato que pegue el culo a los barrotes para que pueda follárselo, pero viendo que el celador se ha quedado dormido Bruce le coge las llaves y en vez de intentar fugarse, se mete en la celda para unirse a Jake y Joel en un trío.
Bruce le mama las pollas a sus compañeros y se deja follar por ellos, uno por la boca y el otro por el culo, hasta que tiene esos dos rabos follando su ojete al mismo tiempo con una doble penetración.
Al final, Jake se convierte en el vagón del medio en un trenecito sexual que llega a su destino dejándole completamente cubierto de semen caliente.
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