UNA FANTASÍA HECHA REALIDAD
Llevamos ya unos meses viendo asiduamente al musculoso Roman, pero no nos cansamos de hacerlo y Greyson se siente especialmente juguetón en cuanto tiene delante al hombre ideal para una de sus fantasías sexuales.
Pero esta vez quiere llevar él las riendas y mientras besa apasionadamente a Roman, Greyson saca un rollo de cinta adhesiva preguntándole “¿Quieres jugar?”. En ese momento Roman se piensa que Greyson quiere ser maniatado con la cinta, pero cuando descubre que en realidad es su fantasía sexual está encantado de someterse a él y convertirse en su juguete sexual.
Greyson rodea las muñecas de Roman con esa cinta y las sujeta al cabezal de la cama para poder jugar con sus perfectos músculos y con su polla a través de los calzoncillos, pero se los quita enseguida para lamer y mamar el rabo de Roman, llevándole al borde del orgasmo con su boca, aunque no le deja correrse y sigue llevándole al limite restregando su polla por su palpitante ojete.
Greyson vuelve a mamar la polla de Roman y le masturba con la mano llena de lubricante, poniéndole su ojete delante de la cara y haciendo que prácticamente suplique que le deje follarle. Finalmente, Greyson se monta encima de la verga de Roman para complacerle.
Greyson mantiene el control mientras Roman cabalga sobre su verga y le embiste con fuerza desde abajo, pero prefiere liberarle para poder besarle y abrazarle, azotar su culo perfecto y que pueda bombear su culo aún más fuerte. Una vez cumplida su fantasía, Greyson deja que Roman tome las riendas comiéndole el culo y empotrándole por detrás. Roman se lo folla con todas sus fuerzas, dominándole verbal y físicamente.
Roman disfruta con el cambio de papeles y voltea a Greyson para mamar su polla y seguir follándole bocarriba, asaltando incansablemente su punto G para llevarle al éxtasis y no para hasta que le hace correrse entre gemidos de placer.
Aun así, Roman sigue embistiéndole hasta que ya no puede aguantar más y saca su pollón del culo de Greyson para gozar en un intenso orgasmo que culmina con una enorme corrida. Diciéndole lo bien que se siente, Roman vuelve a deslizar su polla dentro de Greyson y le besa. ¡Otra fantasía hecha realidad... para ambos!