UN ESPERADO REENCUENTRO
Grayson y Daniel se conocieron hace tiempo y no llegaron a hacer gran cosa, pero ahora si que pueden y están encantados de volver a encontrarse.
De todas formas, tumbado en una hamaca recreándose con su propio cuerpo, Greyson aguarda pacientemente a que Daniel se aproxime. Daniel le mira desde la puerta, tocándose hasta que Greyson le invita a participar.
Los besos apasionados les ponen muy calientes y Greyson mama la polla de Daniel mostrando rápidamente su entusiasmo, tanto en sus palabras como en sus actos.
Greyson engulle hasta el fondo de su garganta el rabo de Daniel, que alarga el brazo para alcanzar su ojete haciendo que Greyson le diga cuanto desea su polla dentro de él.
Pero antes de ceder a los deseos de Greyson, Daniel se toma su tiempo para lamer bien su ojete haciéndose de rogar un poco más hasta que lo empotra para follárselo profundamente, excitado no solo por la manera en la que el pasivo recibe sus embestidas, también por la que su esfínter rodea su polla, agarrándola con firmeza.
Tras entrar en casa, donde tienen mayor intimidad y pueden animar aún más las cosas, Greyson se arrodilla para mamar la polla de Daniel delante de un espejo. Mientras se traga por completo su rabo otra vez, Daniel siente como le tiemblan las piernas, así que toma asiento en el sofá para que pueda seguir mamando.
Después de que Daniel le haya penetrado el ojete con los dedos, Greyson se monta para cabalgar en su regazo, botando arriba y abajo sobre su verga.
Los dos siguen entregados al sexo incansablemente cuando Daniel le embiste por detrás en el sofá y Greyson toma de nuevo las riendas para cabalgar de espaldas a él.
Desmontándole para seguir follándoselo sobre el sofá, Daniel no para hasta que el semen brota de la polla de Greyson a borbotones. Daniel también se corre sobre el boqueante ojete y dentro de Greyson, celebrando finalmente su largamente esperado reencuentro compartiendo el semen del otro entre dulces besos.
Aunque parece que en el porno se ha dejado de usar el preservativo, recomendamos usarlo siempre en las relaciones sexuales. El porno es ficción, la vida real tiene sus riesgos y se deben tener en cuenta.