UN CHILI EXTREMADAMENTE PICANTE
En la estación de bomberos y siguiendo una tradición anual, Andrew prepara un chili picante en la cocina cuando llega Justin, su compañero y se lo da a probar. A Justin le arde la boca... pero no es lo único que se le calienta.
Cuando Justin deja la cuchara con la que ha catado el chili dentro de la cazuela no parece importarle que su saliva acabe en el guiso, después de todo le ha mamado la polla casi todo el escuadrón. “¿Y que te parecería meterla en mi boca?” le pregunta Andrew removiendo el chili. “Pruébala” le dice Justin desabrochándose el pantalón y sacándose la polla para que Andrew la rodee con sus labios.
Justin folla la garganta de Andrew con su dura verga antes de arrodillarse para devolverle el favor.
Deseando que le folle con ese rabo, Andrew apoya una pierna sobre la encimera y después de devorarlo Justin le empotra por detrás, azotándole en más de una ocasión.
Andrew aparta la cazuela y las especias para poder tumbarse de espaldas sobre la encimera con las piernas levantadas para que Justin vuelva a penetrarle a fondo haciéndole gemir de placer.
Pero Justin también quiere probar la polla de Andrew y se da la vuelta para que se la meta por detrás, embistiéndole cada vez más rápido.
Justin se masturba con la mano que le queda libre, disfrutando con la polla de Andrew entrando y saliendo de su culo hasta que lo riega con una de sus enormes corridas.
Justin no puede contenerse por más tiempo, se da la vuelta masturbándose aún más fuerte y finalmente se corre sobre la cara de Andrew con una corrida tan explosiva como la suya.
Andrew se traga la polla de Justin, saboreándola lentamente hasta que suena la alarma y tienen que salir a apagar un incendio... ¡El suyo ya ha sido extinguido!