UN CALIDO RECIBIMIENTO
La novia de Malik quiere hacer oficial su relación y se ha empeñado en que conozca a Paul, su padre. El musculoso joven está muy nervioso, pero su futuro suegro es mucho más cordial de lo que esperaba.
Desde su llegada, Paul no deja de sobar los músculos de Malik sorprendido por su físico, pero cuando la hija se va a comprar algo de comida dejándoles a solas para que se conozcan mejor, los tocamientos exagerados continúan en el sofá. Viendo que Malik está muy tenso y necesita relajarse, Paul le hace un masaje en los hombros, pero no es lo único que está rígido en ese cuerpo musculoso y decide ir al grano... echándole mano al paquete.
Al principio, el sorprendido Malik quiere resistirse, pero Paul sabe lo que quiere y habiendo comprobado que su enorme polla está dura como una piedra, empieza a mamársela sin ninguna resistencia por parte de Malik, que no tarda en quitarse el resto de la ropa para follarle la garganta a Paul.
El papi cabalga sobre el fornido novio de su hija, demostrándole que el estrecho ojete de un hombre es mucho mejor que el de ella y Malik se lo folla en el sofá, embistiendole desde abajo y desde arriba.
Pero antes de que puedan acabar lo que han empezado, su hija llama a la puerta. Paul le dice a Malik que abra y que le espera en el baño. A su novia le sorprende verle desnudo, pero cuando Malik le dice que iba a ducharse, ella no sospecha nada.
En el baño, Paul vuelve a engullir toda la polla de Malik dentro de la bañera antes de darse la vuelta para que pueda empotrarle por detrás.
Ya rendido al placer de ese estrecho ojete, Malik sube a Paul al lavabo para follárselo mirándole a la cara, embistiéndole cada vez más fuerte hasta que logra que se corra sobre su propio vientre.
Paul se arrodilla enseguida para recibir toda la corrida de Malik en la cara y hacerle una última mamada. Justo en ese momento la hija llega en busca de su novio, que disimula y le dice que es mejor que vayan a preparar la cena antes de que vuelva su padre.
