Morena Showbitch
SESIÓN DE FOTOS
El culturista argentino Marco es el primero en llegar al estudio para su sesión de fotos desbordando masculinidad, musculatura y belleza, incluso antes de quitarse la camiseta, deslumbrando al fotógrafo Favio, que con una sonrisa encantadora y cámara en mano ya está excitado viendo a su fogoso modelo.

A escasos centímetros del enorme paquete que la gruesa polla del culturista marca en sus calzoncillos, Flavio se los ajusta ligeramente para la foto en varias ocasiones, cada vez que Marco tiene que cambiarse de modelo de ropa interior.
La sesión se descontrola cuando Favio ve que Marco ya no puede ocultar su completa erección y le quita los calzoncillos. Todos sus sentidos se colapsan viendo la magnifica polla sin circuncidar frente a sus ojos, gruesa, venosa y dura como una roca. Favio se ve embelesado y poseído por toda esa masculinidad y abre bien su hambrienta boca para que Marco pueda follarsela. Marco se muestra agresivo, abofeteándole la cara y escupiéndole en la boca sin dejar de follarle la garganta, pero a Flavio le encanta.
Con su verga tan dura como el resto de su imponente físico de culturista, Marco le da la vuelta a Favio para clavársela a pelo dentro de su bronceado culo. Marco no pierde el tiempo, acelera el ritmo de sus embestidas y casi al instante está entregado a una salvaje follada.
Marco agarra a Favio por la boca como si estuviese montando a un potro salvaje, tratándolo con la misma dureza, metiéndole profundamente y sacándole la polla aceleradamente.
Después voltea a Flavio, tirado de espaldas en el suelo con las piernas bien abiertas, para seguir bombeando ese orificio del placer con su verga, disfrutando ambos de una sensación de euforia sexual. Marco ralentiza el ritmo para darle a Flavio la oportunidad de sentir su poderoso rabo en toda su longitud y grosor.

El placer de ambos va en aumento, creciendo más y más mientras Marco sigue clavando su polla de granito en el placentero canal de Favio.
A pesar de sus esfuerzos por prolongar la follada, Marco ya no puede más y se corre sobre Flavio, metiéndole otra vez su recién ordeñada polla bien adentro. Eso hace que Flavio se deje ir finalmente y que su corrida brote con la misma ferocidad con la que acaba de ser follado.

¡Esta sesión de fotos ha sido agotadora, pero más que satisfactoria, tanto para el fotógrafo como para el modelo!