Seguimos con otros dos chulazos haciendo lo que mejor saben hacer como dotado activo dominante y como sumiso pasivo de grandes músculos: Dom y Kyle.
Dom comienza su día con su pollón en la mano para masturbarse, animando a que Kyle le eche una mano con una buena mamada, aunque no tardan en mamarse las pollas el uno al otro.
Antes de que podamos darnos cuenta, un verbal Dom le folla la garganta al insaciable Kyle, que desde ese momento y en señal de sumisión total se dirige a él como “Señor”.
Dom le dice a Kyle todo lo que tiene que hacer y cuando el pasivo obedece aún le pone más caliente. Siguiendo sus ordenes, Kyle le muestra su culo que Dom devora y prepara para la penetración, poniéndolo a prueba con su gruesa y dura verga, reafirmando su dominio verbalmente antes de empotrarlo para follárselo de todas las maneras posibles. A Kyle le encanta eso, especialmente cuando Dom abusa de él haciendo que se le ponga más dura.
Dom no se rinde, empujando a Kyle sobre la cama para seguir empotrándole. Kyle no parece tener suficiente, le vuelve loco y quiere más.
A medida que se acercan al orgasmo, Dom quiere verle la cara y le da la vuelta sin dejar de follárselo, embistiendo a Kyle hasta que le ve correrse. Dom también lo hace con una enorme corrida y obliga al sumiso pasivo a mamarle la polla hasta que no quede una gota.
Kyle está muy satisfecho con Dom y lo bueno que ha sido. Por una vez no necesita decir ni una palabra-- solo hay que verle la cara.
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