MASAJE A DOMICILIO
El musculoso masajista Jim recibe una llamada de Grey para que le haga un masaje a domicilio, pero lo que no esperaba es que su cliente tuviese una polla tan grande.
A medida que sus manos recorren la espalda de Grey y se cuelan bajo la toalla para masajear sus gluteos, Jim se pone cada vez más cachondo, incapaz de disimular la erección dentro de sus pantalones.
Tampoco Grey puede ocultar la suya, así que, con su consentimiento, Jim se ocupa de ella con sus habilidosas manos y boca.
Completamente desnudo, Jim se sienta sobre la verga de Grey para cabalgar, subiendo y bajando incansablemente su musculoso culo, duro como una piedra.
Cuando Grey le desmonta sigue follándoselo tumbado de lado sobre la camilla y finalmente cara a cara, dejando que Jim se masturbe hasta correrse salpicando sus perfectos abdominales.
Inmediatamente después, Grey cubre las pelotas de Jim y sus nalgas con una corrida espectacular.
