LOS MEJORES EN LA CAMA
Danny tiene muy claro como deben ser los hombres con los que se acuesta y no le gustan los delgados, porque considera que no son buenos en la cama.
Pero cuando se entera Trevor, su compañero de piso, se propone demostrarle a Danny lo equivocado que está colándose en su habitación para mamarle la polla y dejarle comerle el culo antes de tomar la iniciativa y cabalgar sobre su gruesa y dura polla.
Danny empieza a cambiar de opinión sintiendo ese estrecho ojete cerrándose alrededor de su polla y embistiéndole desde abajo con todas sus fuerzas.
Viendo que está a punto de correrse Trevor le desmonta para que Danny siga follándoselo a cuatro patas y en la postura del misionero.
Con la polla de Danny dentro de su culo y la suya en la mano, Trevor se corre sobre su fibrado vientre poco antes de que su incrédulo compañero de piso lo haga en su culo.
Jadeando sobre la cama el uno junto al otro a Danny no le queda más remedio que admitir que los delgados, o al menos Trevor, es muy bueno en la cama.