EXPLOSIÓN DE TESTOSTERONA
Tras ser expulsados del campo por una pelea antes del final del partido, el delantero Adrian y su compañero Joseph acaban en el vestuario del equipo donde retoman su acalorada discusión.
Joseph es el nuevo fichaje del equipo, pero según Adrian ha estado quitándole cada vez más protagonismo en el campo, eso es algo que Joseph encuentra injusto, diciéndole que lo que tiene son celos. No es culpa suya que sea mejor jugador que él y que Adrian no sepa respetar las decisiones del entrenador.
Adrian sigue sin aceptar ni una de las palabras que salen de la boca de Joseph, de hecho le acusa de usar su homosexualidad para atraer mayor atención mediática, cuando los dos son gays.
La cuestión es que a diferencia de Joseph, Adrian no ha querido salir del armario públicamente porque considera que puede perjudicar a otros deportistas gays que aspiran a jugar en el equipo. Joseph no se puede creer esta acusación y las cosas se ponen cada vez más acaloradas entre ambos, plantándose cara a cara.
En ese duelo por convencer al otro y demostrar que cada uno de ellos tiene la razón, la pelea llega a un punto en el que Adrian empuja a Joseph contra una de las taquillas.
Con sus miradas clavadas y la respiración agitada, la tensión sexual explota y se dan un beso apasionado, que les lleva al sexo más intenso alimentado por la rabia.
Turnándose para mamarse las pollas el uno al otro, está claro que los dos quieren ser el macho-alfa.
Incluso cuando se da la vuelta para que Adrian se lo folle a cuatro patas y tumbado de espaldas sobre uno de los bancos de madera, Joseph se mantiene desafiante...
Y tan pronto tiene la ocasión le da la vuelta a la situación y se pone a cabalgar sobre la dura verga de Adrian, demostrándole que, aun siendo el pasivo, él lleva las riendas.
Una vez que este encuentro en el vestuario llega al final... ¿Serán capaces estos dos temperamentales jugadores de trabajar juntos en equipo? ¿O es solo el primero de otros muchos encontronazos?