ENTRE REJAS
Miguel espera con ansiedad el día de la revisión del tercer grado y confía en poder reunirse fuera de la cárcel con su novia cualquier día de estos, así que cuando le asignan un nuevo compañero de celda mantiene la cabeza fría y no se deja arrastrar por los juegos de Jordan.
Mientras que Miguel está a punto de conseguir la libertad, a Jordan todavía le queda una buena temporada en la cárcel, así que intenta sacar el mejor partido de una mala situación.
El tiempo vuela cuando lo pasas bien y Jordan podría pasarlo en grande con un compañero de celda tan guapo y bien dotado.
Pero cuando Miguel recibe una carta en la que le comunican que deberá pasar 3 años más encerrado pierde la paciencia y estalla. Afortunadamente para él, tiene a un más que conveniente y preparado compañero de celda dispuesto a aliviar su frustración.
Sexualmente frustrado y curioso, Miguel sucumbe a la tentación y empotra al niñato en la celda... justo lo que Jordan venía pidiendo desde que llegó.
