EN MANOS DE SEAN
Sean ha vuelto para mostrar su lado sutilmente dominante y ese pollón rebosante de energía... y Evan está completamente rendido a sus pies.
Evan se pone en las experimentadas manos de Sean, tumbándose bocabajo sobre la cama, dejando que le chupe los dedos de los pies, que masajee su culo y se le tire encima susurrándole en la oreja y mordisqueándola. Continuando con su sensual masaje, Sean se coloca enfrente de Evan y empieza a restregarse contra su cuerpo, dejando que su enorme rabo acaricie suavemente su cabeza y su cara. Sean le quita los ajustados calzoncillos a Evan para hundir su cara entre sus nalgas, buscando ese estrecho ojete para juguetear con él. Sean levanta la cara de Evan para besarle, jugueteando lentamente con sus lenguas antes de hacerle abrir bien la boca para empujar lentamente y meterle su enorme polla, entrenándole lentamente para que pueda tragársela por completo sin atragantarse y follarle la garganta. Evan es volteado por Sean para hacer un breve 69 pero después Sean toma el control recostándose para que Evan pueda mamar su gigantesca polla. Usando manos y boca, con una pequeña ayuda de Sean, Evan toma todo lo que puede.
Por mucho que a Sean le guste que le coman el rabo, no aparta la mirada del ojete de Evan y le mete los dedos mientras se la sigue mamando, pero acaba dándole la vuelta para devorarle el culo.
Evan levanta el culo ansioso por sentir ese pollón dentro, pero Sean solo lo restriega entre sus nalgas porque prefiere voltearlo de nuevo para follárselo despacio. Sean se abre paso dentro de Evan, besándole apasionadamente hasta que toda su polla está dentro de su culo.
Tumbándose de espaldas sobre la cama, Sean deja que Evan cabalgue montado sobre su polla recibiendo también sus embestidas desde abajo para que la sienta profundamente, pero todavía no quiere correrse y una vez más le da la vuelta para follárselo por detrás .
Tras follárselo tumbados de lado, Sean no tarda demasiado en hacer que una enorme corrida brote de la polla de Evan y lame el esperma caliente esparcido por su estomago y su pecho. Colocándose encima de su cara y escupiendo parte de la corrida que acaba de recoger sobre su mano para lubricar su polla, Sean le folla la garganta a Evan, le besa y se vuelve a tumbar de lado para restregarle la polla por el boqueante ojete. Pero es cuando Evan se sienta sobre la cara de Sean, que un geiser de esperma brota con fuerza de su polla en un orgasmo acompañado de espasmos de placer.
Evan alarga los espasmos de Sean agarrándole la polla para ordeñar hasta la última gota y le deja lamer sus dedos para que cate el sabor de su semen. Besándose una vez más, los dos se dejan arrastrar por la relajante calma que sigue al orgasmo.