EL CALLEJÓN

Cuando el musculoso hombre de negocios Ryan está demasiado cachondo como para concentrarse en el trabajo, se da un paseo a plena luz del día por el sórdido callejón que tanto le gusta para relajarse y desahogarse…

Nada más llegar se encuentra con Teddy, un fornido y peludo papi que espera allí a que su boca y su ojete sean tomados por la enorme polla de un hombre dominante.

Ryan, tan cachondo como siempre, está más que encantado de poder satisfacer las necesidades del desconocido y los dos se meten en un edificio abandonado para mamar pollas, follar a pelo y correrse antes de que Ryan tenga que volver a la oficina.

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