Brysen y Robbie son dos de las estrellas favoritas de este estudio porno, pero no habían visto antes a Matthew en el gimnasio.
El barbudo australiano acaba de llegar a la ciudad y entablan una conversación con él después de cruzar miradas, admirar sus cuerpos musculosos y quitarse las camisetas.
Los tres chulazos se besan y Matthew le mama la polla a los dos activos, engullendo la de Brysen hasta las pelotas mientras Robbie le lame el ojete.
"¡Joder, sí, que bueno!" exclama el pasivo entre gemidos de placer cuando acaba siendo empotrado por detrás por Robbie mientras Brysen le folla la garganta.
Matthew está preparado para el reto y deja que los dos sementales le metan sus duras pollas por el culo al mismo tiempo.
Después, Robbie se folla la boca de Matthew mientras Brysen embiste su impresionante ojete en la postura del misionero.
Al final, Matthew se masturba hasta correrse y recibe el semen caliente de sus dos nuevos colegas sobre la cara.
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