El musculoso Mateo y el niñato Maverick son buenos amigos, pero como buenos heteros siempre están rivalizando y compitiendo por todo.
Haciendo ejercicio al aire libre, Maverick confÃa en que la corpulencia de Mateo le haga más lento y le de cierta ventaja cuando hacen una apuesta: aquel de los dos que pierda haciendo flexiones le tendrá que mamar la polla al otro.
Pero el niñato se lleva una sorpresa cuando ve que Mateo le gana y de vuelta a casa, vuelve a adelantarle a la hora de meterse en la ducha primero.
No importa, porque una vez en el baño y viendo a Mateo desnudo y con la polla tiesa, Maverick no tarda en quitarse toda la ropa, cayendo de rodillas para llenarse la boca con ese grueso rabo sin circuncidar.
A partir de ese momento y viendo como disfruta siendo follado por detrás, cabalgando sobre la verga de Mateo, corriendose tumbado de espaldas en el lavamanos o tragándose la corrida de su colega arrodillado en el suelo, tenemos serias dudas de que Maverick no perdiese la apuesta intencionadamente.
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