ACALORADOS EN EL BOSQUE

Tras un paseo entre los árboles, los acalorados chulazos Devy y Deacon se quitan las camisetas y no pueden quitarse los ojos el uno del otro.

Y muy pronto el flirteo en medio del bosque se convierte en besos románticos mientras sus manos y sus bocas recorren sus irresistibles pechos y restriegan sus cada vez más voluminosos paquetes a través de sus tejanos.

De vuelta a casa, los chulazos se siguen besando con voracidad, quedándose completamente desnudos. Deacon saborea la polla de Devy antes de ponerse a cuatro patas sobre el sofá para que le coma el culo. “¡Méteme la lengua por el ojete!” gime Deacon, haciendo que Devy le complazca gruñendo “¡Es un culito muy sabroso!”.

El activo acaba dándole a Deacon lo que tanto desea, embistiendo su punto G mientras se lo folla por detrás.

Deacon toma las riendas momentáneamente para cabalgar sobre la enorme verga de Devy, pero aún no tiene suficiente, necesita que se lo folle aún más y mejor, y así se lo suplica.

Retomando el control, Devy desmonta a Deacon para follarle más profundamente y rápido en la postura del misionero hasta hacerle llegar al orgasmo.

Deacon se corre salpicando sus abdominales y recibe toda la corrida caliente de Devy sobre la cara.

Aunque parece que en el porno se ha dejado de usar el preservativo, recomendamos usarlo siempre en las relaciones sexuales. El porno es ficción, la vida real tiene sus riesgos y se deben tener en cuenta.